MATADOR MOZO
El sábado 19 de septiembre, Andrés Roca Rey se jugará la vida en las Arenas de Nimes, Francia. La alternativa se la dará Enrique Ponce.
Escribe Jaime de Rivero
Publicado: Jueves, 17 de setiembre de 2015
Todas las plazas son importantes. Se juega la vida con el mismo rigor en Las Ventas de Madrid como en cualquier pueblo modesto. Y fue precisamente en uno de ellos, Villaseca de la Sagra, cerca a Toledo, en donde el 7 de septiembre, Andrés sufrió una fuerte cornada al entrar a matar al sexto novillo de Flor de Jara. Con la herida abierta remató la muerte con el descabello, recibió el trofeo y pasó a la enfermería.
El parte médico ratificó la gravedad del percance:“herida por asta de toro en el tercio medio del muslo derecho de 18 centímetros, con una profundidad y dirección hacia arriba y afecta a los abductores”. Fue trasladado de urgencia a Toledo y luego a Sevilla, en donde también se confirmó la fractura del pulgar izquierdo.
No es la primera vez que la tragedia se asoma en sus faenas, pues la verdad de su toreo lo hace colocarse al filo de los pitones. A inicios de temporada recibió tres cornadas entrando a matar en Madrid. Un mes después, la misma plaza fue testigo de un dramático puntazo en el cuello que hizo temer lo peor.
Aparatosa cornada entrando a matar en Villaseca, ocurrio el 7 de setiembre. |
El sábado 19 de septiembre, Andrés Roca Rey se convertirá en matador de toros en las Arenas de Nimes, un anfiteatro romano situado en el sur de Francia que funciona como coso desde mediados del siglo XIX. La alternativa se la dará el maestro Enrique Ponce, la máxima figura de los últimos 25 años y torero de época, teniendo como testigo a Juan Bautista y toros de las prestigiosas ganaderías Juan Pedro Domecq y Victoriano de Río. Un marco excepcional para uno de los acontecimientos más esperados de la temporada taurina que, por su importancia, será transmitido por televisión.
Andrés se ha ganado ese privilegio. Es el líder del escalafón de novilleros con una notoria distancia del resto. Ante sus inusuales condiciones y la solvencia con la que lidia astados de distintos encastes, sean nobles o peligrosos, los críticos españoles no han dudado en catalogarlo como la próxima figura del toreo.
Razones sobran. El peruano ha tenido una temporada arrolladora, cortando apéndices en todas las plazas. En abril, salió en hombros de Las Ventas –después de 66 años de que lo hiciera nuestro compatriota Raúl Acha “Rovira”– y un mes después, ratificó sus credenciales en la Feria de San Isidro, la más importante del calendario taurino y de la que resultó uno de los triunfadores. A los pocos días, cortó dos orejas y abrió la puerta grande de La Maestranza de Sevilla, la segunda plaza en jerarquía, para luego continuar con éxito por España, Francia y México.
El maestro Enrique Ponce "Torero de Lima", será el padrino de alternativa |
Pero sería en agosto, en las Corridas Generales en Bilbao, plaza que rinde culto al toro serio, en donde Roca Rey hizo el mayor alarde de sus cualidades. Cortó tres orejas y salió en hombros, tras brindar dos faenas llenas de conocimiento, arte y valor. En el diario ABC, Andrés Amorós relató lo acontecido en la crónica “Firme como Roca, mandón como Rey”, parafraseando su apellido, que indica templanza y poder.
No recuerdo novillero que en la misma temporada haya salido a hombros de Madrid, Sevilla y Bilbao. Menos como lo ha hecho. Lidiando, dominando y triunfando con animales con dificultades porque, hay que decirlo, todavía no le ha salido el toro bravo, noble y repetidor, ese que cuando se le cuaja faena en plaza importante deja grabados momentos imborrables en la historia.
Andrés domina la técnica, maneja con clase los engaños y brilla con su personalidad. En cada capotazo, quite o muletazo lleva el deseo de gloria. Y es que no se puede torear con tanta verdad, tan reunido y a merced de la fiera.
El primer atributo que destaca en Andrés, por ser el más visible, es un valor frío y seco que le permite aguantar las embestidas sin inmutarse. El valor es el requisito esencial para ser torero; sin aquel no se puede tener la tranquilidad para aplicar la técnica ni emanar arte, que es el sentimiento personal que distingue a los toreros.
Pero su cualidad más sorprendente es la inteligencia. Posee la capacidad de pensar con serenidad y resolver las dificultades en la cara del toro, en esos terrenos que son propiedad del miedo y el peligro. Esta notable virtud que es muy escasa, es la que separa a las figuras del toreo del resto de matadores de toros, pues les permite aprovechar un mayor número de animales sin que se les escapen los de lío gordo.
Roca Rey no se intimida y las secuelas de la reciente cogida no son obstáculo para el ambicioso objetivo de convertirse en figura del toreo. El gran matador de toros que el Perú tanto necesita. Hace una semana recibió el alta médica y está practicando de salón. No toreará más novilladas hasta el día de la alternativa. Con mentalidad de guerrero y sentimiento de artista afrontará este compromiso, el más importante de su vida. Alternar con Enrique Ponce y abrir la codiciada puerta de los Cónsules de Nimes.
Imponente Arenas de Nimes, levantada en el año 27 a.C, será el escenario de alternativa. |
Sr. De Rivero le agradezco por este genial artículo, de lo mejor que he leído y con el que repasa la trayectoria de este año de Andrés Roca Rey que mañana hará mas grande al Peru taurino.
ResponderEliminarCarlos Fernández
Jaime: Muy buena descripción de las virtudes de Andrés. Es para todos los aficionados peruanos un enorme orgullo constatar tarde tras tarde cómo la prensa mundial se rinde ante su enorme torería. Estamos a punto de ver el nacimiento del matador de toros peruano que, tranquilamente y sin exageraciones, puede iniciar su carrera con voz firme y ya con un importante número de triunfos en el esportón. Suerte Andrés...todos estamos pendientes de verte salir a hombros...!
ResponderEliminarMagnifico texto muy claro y contundente. Tenemos un gran torero.
ResponderEliminarR.
Enorme nota la suya sobre Andres Roca Rey. Mucha claridad en conceptos y acuciosidad para centrar esa virtud diferenciadora. Inteligencia en la cara del toro que no es habitual hoy que vemos toreros y toreros que tiran trapazos alguno muy bonitos pero no lidian sin hondura, recogen saludos ante toros que se van al matadero con dos orejas que se caían.
ResponderEliminarD. Fernádez