lunes, 27 de octubre de 2025

Revista APLAUSOS: "JOAQUIN GALDOS Y FERNANDO ADRIAN A HOMBROS EN ACHO" Escribe JAIME DE RIVERO

 


JOAQUIN GALDOS Y FERNANDO ADRIAN A HOMBROS EN ACHO

David Galván, que completaba la terna, resultó herido; con los tendidos casi llenos.

Corresponsal JAIME DE RIVERO

Los triunfadores de la segunda corrida han sido Fernando Adrían y Joaquín Galdós, quienes salieron a hombros de Acho, tras cortar tres y dos orejas, respectivamente, al exigente encierro de Montalvo, desiguales en presentación y juego, destacando los corridos en 1°, 3° y 5° lugar. 

Fernando Adrían tuvo el mejor lote, cortó una oreja al primero de la tarde -con el que confirmó alternativa-, un toro-toro abanto y suelto, que embestía con nobleza y calidad desde los primeros capotazos, virtud que mantuvo hasta su muerte. Cumplió en varas y con las banderillas.

Adrián inició con pases por alto y cambiados atornillado en la arena, para continuar con las tandas de derechazos rematados con el de pecho. Lo mismo hizo por naturales, aprovechando la nobleza del toro. Trasteo limpio, sin enganchones, que tuvo la virtud del temple. El español culminó con un arrimón, extrayéndole derechazos, cambiados y bernardinas entre los pitones. Una estocada trasera de rápido efecto, fue suficiente para cortar la primera oreja de la tarde.

El quinto se fijó pronto en el capote de Adrián, humillando por ambos pitones. Empujó al caballo en una buena vara, cogiendo de mala manera a un subalterno que fue retirado a la enfermería.  

Inició la faena con cambiados por la espalda citando en los medios. En animal era remiso al toreo fundamental en las primeras tandas, pero el español con la muleta en la cara, tiró de él hasta armar series de derechazos ligados por abajo. Hizo lo propio por naturales para luego acortar los terrenos. Terminó entre los pitones, engarzando muletazos por cada lado. Los adornos finales fueron unas manoletinas muy ceñidas. Faena de valor y exposición que gustó a los tendidos. Mató de una estocada baja, pero aún así se le otorgó dos orejas.

David Galván enfrentó al peor lote. El segundo fue un manso encastado, con cuajo y clase, que hizo cosas de manso y cosas de bravo. Abanto de salida, tardó en fijarse y se escupió tres veces en el caballo, antes de poder ser picado. En el segundo terció salió suelto, tendiendo hacia la querencia de la puerta de toriles. Con la muleta, Galván intentó por abajo para retenerlo, aprovechando que el animal humillaba, pero sin hacerlo romper. No le cambió de terrenos dejando que el toro lo lleve hasta su querencia, en donde ya no fue posible hacer más.  Lo despachó con una estocada caída del lado contrario.

No hubo nada con el cuarto, un astado feo de tipo que salió enterándose, sin recorrido, clase ni fondo alguno. En un descuido lo coge y revuelca por varios metros, llevándose una cornada en el tobillo. Visiblemente adolorido, Galván ejecutó la suerte de matar que completó con un golpe de descabello, para luego pasar a la enfermería de donde no regresó.

Joaquín Galdós tuvo una tarde redonda en Acho, con un lote difícil al que supo imponerse con actitud, inteligencia y valor.  El tercero se fijo pronto en el capote de Galdós, repitiendo y humillando con clase y codicia, luciendo su buen toreo de capote. Cumplió en varas y con los palos.

El inició de faena fue colosal, por abajo con doblones y otros con la rodilla en tierra, enseñándole a embestir largo y por abajo. Las siguientes tandas de derechazos terminaron de encender los tendidos, aprovechando el poder y la trasmisión del toro que también mostraba calidad y clase extraordinarias. Por naturales no se entregó tanto como por derechazos. Dejó el estoque envasado. Faena de dos orejas que sólo se premió con una.

El último de la jornada, feo de tipo, incierto, mirón y reservón, fue bien picado y castigado como requería, a pesar de las protestas absurdas de un sector de indocumentados.  Con la pica el toro cambió, ganó movilidad permitiendo el tercio de banderillas.  En la muleta presentó varias dificultades, acudía descoordinado, topando y rematando por alto. El limeño lo lidió con acierto, cruzándose con toques fuertes para extraer pases de uno en uno hasta hacerlo repetir.  Corrigió varios defectos del toro, aguantando el peligro incluso cuando lo intentó por el pitón izquierdo. Con inteligencia, técnica y valor, dominó y superó a su adversario.  Mató de una estocada arriba pero caída, y recibió una oreja otorgada con el consenso de la plaza.

 

Plaza de Acho:  Plaza casi llena. Se lidiaron 6 toros de Montalvo, desiguales en presentación y juego, pobres cabeza. Confirmó alternativa Fernando Adrían. David Galván (silencio y silencio), Fernando Adrían (una oreja y dos orejas) y Joaquín Galdós (una oreja y una oreja).

domingo, 26 de octubre de 2025

Revista APLAUSOS: "BUENA IMAGEN DE PEDRO LUIS EN LIMA" Escribe JAIME DE RIVERO

Pedro Luis con el 5° que más humilló y repitió por abajo del encierro.

 Mucha atitiud de Tomás Bastos ante la novillada de Camponuevo.

Corresponsal Jaime de Rivero.

La terna se fue de vacío en la segunda novillada de la Feria del Señor de los Milagros. Rafael Puga Castro envió un encierro de Camponuevo bien presentado, que tuvo fuerza, nobleza y un punto de picante que le dan personalidad a esta ganadería, reses a las que hay lidiar y hacerles las cosas con acierto, porque de lo contrario tienden a complicarse o apagarse.  Novillada interesante para los buenos aficionados que evalúan a los toreros y su capacidad de resolver los problemas que presentan sus adversarios.

El que abrió plaza se inutilizó durante la lidia y fue despachado por José Antonio Guerra. El segundo de su lote, era un novillo probón y mirón con mucho que torear, pero con la virtud de que humillaba en la brega, incluso en el inicio de faena.  En la muleta, el novillo se fue aplomando de a pocos, embistiendo de uno en uno, a Guerra le faltó atacarlo para provocar la acometida y poder ligar los pases. Si el toro no acude, el novillero con hambre debe ir a buscarlo. Dos pinchazos y estocada baja. Silencio.

Pedro Luis estuvo solvente y valiente con el segundo de la tarde, un novillo que repetía con codicia y peligro, ciñéndose y tirando un gañafón al final de las suertes. Con la muleta, el peruano aguantó las embestidas del animal que era mirón y tendía a quedarse corto.  Lo toreó por el pitón izquierdo porque por el derecho se vencía, poniendo la cuota de valor y entrega necesaria para sacarle todo lo que había y que debe tener un novillero que aspira a más. Tras la estocada algo trasera, salió a saludar al tercio.

Pudo cortarle una oreja al quinto, que exhibió nobleza y entrega mientras duró. Inició la faena de rodillas toreando por abajo, aprovechando que el animal acudía con trasmisión y recorrido. Las primeras tandas por el derecho fueron las más ligadas, siempre llevando al novillo embebido en la pañosa. Cuando cambió de mano el astado no respondió de la misma manera e inició su declive hasta aplomarse. Entró con convicción a matar, dejando una estocada perpendicular que completó con varios descabellos. Palmas.

Tomas Bastos resolvió la papeleta que le planteó el burraco que saltó en tercer lugar, y que llegó incierto a la muleta. En las series iniciales el novillo medía y no quería repetir, por lo que Bastos pasó a la ofensiva atacándolo, yendo hacia él para provocarle y así, invadiendo sus terrenos y cruzándose, logró ligar los muletazos y hacer sonar la música. Las series por derecha fueron en cercanías, tocándolo fuerte para retenerlo y ligar en redondo. Buena lidia de un novillero que resuelve. Los adornos finales fueron por bernardinas, muy ajustadas. Lo despachó de un pinchazo y estocada.

Al portugués le costó fijar al que cerró plaza, un novillo negro que llegó aplomado al tercio final, en donde no dio facilidades, se defendió descolgando la cabeza y queriéndose sacar la muleta. Dejó una estocada trasera que complementó con dos descabellos.

 

Plaza de Acho.  Media entrada. Segunda novillada, tercer festejo de abono. Se lidiaron 6 novillos de Camponuevo, bien presentados de distinto juego y pelaje, para José Antonio Guerra ( silencio y silencio) Pedro Luis (saludo desde el tercio y aplausos) y Tomas Bastos (saludos desde el tercio y silencio).

 

sábado, 25 de octubre de 2025

Revista CARETAS: "LIDIA, PODER Y ALEGRIA" Crónica 1° Corrida ACHO 2025

 

Escribe JAIME DE RIVERO

La lidia es el alma recia y fértil del toreo. Dominar al toro es y debe ser la misión trascendental de un torero en la plaza. Para lograrlo, el requisito sine quanon es entender al adversario, identificar sus defectos y virtudes, para proponer los recursos para doblegarlo y someterlo. La estética, como el triunfo, llegan por añadidura, pues sin esa esencia de dominio sobre el animal el resto es mera apariencia, forma sin contenido, de menor mérito y estimación.

Jesús Enrique Colombo tuvo claridad para entender y lidiar al ganado del domingo, de los hierros de San Pedro y Salamanca, que tuvo edad, peso y trapío, que embistió y repitió con nobleza, aunque primaron los abantos, sueltos y sin clase. Ese punto de mansedumbre debe corregirse, dentro de una evolución positiva de muchos años que muestra la ganadería.

Desde el inicio, el venezolano comprendió las dificultades del encierro, toros a los que había que fijar rápidamente y llevarlos embebidos en los trastos para convencerlos de embestir.  Recibió con valor y firmeza las embestidas del primero de San Pedro -tercero de lidia-, llevándolo con verónicas hasta los medios. Luego de un picotazo, ofreció un gran tercio de banderillas con dos pares citando a los medios con el toro galopando por 20 metros y el último al violín, todo entre ovaciones, ratificando que es un torero bullidor y alegre que conecta fácil con los tendidos.

Inició la faena por abajo, con doblones y macheteos para ahormar al toro y someterlo. Esa fue la clave de la lidia -y de la corrida-, llevarlo por abajo, dejándole la muleta en la cara para hacerlo repetir y evitar que se vaya. Así, concluyó tandas por derecho e izquierdo, logrando que el astado rompa a embestir. Con una buena estocada recibió una justa y merecida oreja.

El que cerró plaza, de similar juego, tuvo mayor movilidad, pero menos clase. Tras la vara y el castigo medido, brindó otro gran tercio de banderillas entre fuertes ovaciones, destacando en el par al violín.

Planteó la faena de la misma manera que al primero, iniciando y rematando las series por abajo, pero con la diferencia de que este San Pedro protestaba y calmocheaba, lo que derivó en enganchones que impidieron una faena sólida. La estocada fue soberbia, de efectos inmediatos en los medios, algo desprendida, por la que se le dio una oreja pedida por gran parte del público, pero sin hacer mayoría. Aquí el Juez falló.

Morenito de Aranda es un torero fino, de corte artista, de esos que tanto gustan en Acho. Es de los que necesita al toro propicio para su obra, como el que abrió plaza de San Pedro, que de salida repitió con poder y codicia, y al que recibió con firmeza por verónicas y delantales de mucho gusto.

Tras un puyazo y las banderillas de rigor, inició la faena con suavidad, sin forzar al toro, llevándolo a media altura por pitón derecho para luego exigirle por abajo. A partir de la tercera tanda, le bajó la mano y el animal colaboró, repitiendo cada vez más. Las siguientes series fueron más logradas, tanto por derechazos como por naturales, algunos citando con la muleta rendida en la arena y corriendo la mano por abajo. Fueron lo más fino de la tarde, con pases sobrados en profundidad, gracia y torería.

Cuando el toro comenzaba a declinar, tomó el acero para los adornos finales que fueron por alto.  No tocó pelo por fallar con el estoque, recibiendo una ovación desde el tercio.

El de Aranda no entendió a cabalidad al cuarto de la tarde, un jabonero con más raza y clase, pero que no daba tantas facilidades. El toro avisaba de su buena condición cada vez que era bregado por abajo, humillando y girando la testuz para colocar el pitón por delante. La res exigía ese toreo por abajo. Morenito hizo lo contrario, llevándolo a media altura con la pañosa. Y no logró que el animal ni la faena rompieran de verdad. Pinchó varias veces y escuchó un aviso.     

Alfonso de Lima no tuvo una tarde afortunada con los Salamanca. El primero -segundo de lidia- fue el peor de la tarde; soso, sin codicia ni trasmisión. Solo pudo arrancarle una serie ligada por abajo con la muleta puesta en la cara. No comprendió al quinto, de similar condición a los corridos en tercer y cuarto lugar, y al que también había que someterlo por abajo para convencerlo de embestir y meterlo en muleta. Lo intentó a media altura, dudando, con remates por alto que, con los enganchones, fueron echando a perder al toro y complicando más su lidia. Se eternizó con la espada, ante las protestas del público.

domingo, 19 de octubre de 2025

APLAUSOS: "COLOMBO PRIMERA PUERTA GRANDE ACHO 2025" Escribe JAIME DE RIVERO

 


COLOMBO PRIMERA PUERTA GRANDE DE ACHO

El diestro venezolano cortó una oreja a cada uno de su lote. Morenito de Aranda brilló con el primero de la tarde.

Corresponsal Jaime de Rivero

El triunfador de la primera corrida de toros de la septuagésima octava edición de la Feria del Señor de los Milagros ha sido Jesús Enrique Colombo, que tuvo claridad para entender al ganado y darle la lidia adecuada para poder extraer el fondo de bravura que tenían los de San Pedro y Salamanca. Ambas han mostrado una evolución positiva en los últimos años, que hoy refrendaron con una corrida con edad, peso y trapío, que embistió con nobleza, aunque con un punto de mansedumbre que se debe corregir.

Desde el inicio, Colombo comprendió las dificultades de este encierro, en que predominaban los abantos, sueltos y sin clase, a los que había que fijar rápidamente para convencerlos de embestir.  Recibió con valor y firmeza las inciertas embestidas del primero de San Pedro -tercero de lidia-, llevándolo con verónicas hasta los medios. Tras un picotazo, ofreció un gran tercio de banderillas con dos pares citando a los medios y el último al violín, entre ovaciones del público.

Inició la faena de muleta por abajo, con doblones y macheteos para ahormar al toro y someterlo. Esa fue la clave de la lidia, llevarlo por abajo, dejándole la muleta puesta en la cara para hacerlo repetir y evitar que se vaya. Así, logró concluir tandas por derecho e izquierdo, logrando que el astado rompa a embestir hasta que terminó rajándose.  Con una buena estocada recibió una justa y merecida oreja.

El que cerró plaza, de similar juego, tuvo mayor movilidad, pero menos clase. Tras la vara y el castigo medido, brindó otro gran tercio de banderillas entre fuertes ovaciones, destacando en el par al violín.

Planteó la faena de la misma manera que con el primero, iniciando y rematando las series por abajo, pero con la diferencia de que el Salamanca protestaba y calmocheaba, lo que derivó en enganchones que no dieron fluidez a su labor, impidiendo que la faena alcance una estructura sólida. La estocada fue soberbia en los medios, de efectos inmediatos, por el que se le concedió una oreja que fue pedida por gran parte del público, pero sin lograr mayoría.

Morenito de Aranda tuvo los momentos más sublimes de la tarde con el primero de San Pedro, con el que confirmó alternativa.  Un colorado que de salida, repetía con codicia al capote del español, que lo recibió por delantales y verónicas instrumentados con gusto y categoría.

Inició la faena sin forzar al toro, llevándolo a su aire, a media altura en las primeras tandas por pitón derecho para luego exigirle por abajo.  Dejándole la muleta en la cara al final del muletazo, el animal cedió al juego, repitiendo cada vez más.  Las series ligadas citando con la muleta rendida en la arena y corriendo la mano por abajo, fueron lo más fino de la tarde, con pases sobrados en profundidad, gracia y torería.

Tomó el acero en el momento preciso, cuando el toro comenzaba a declinar, para los adornos por alto.  No tocó pelo por fallar con el estoque, reduciendo el premio a una ovación desde el tercio.

El de Aranda no entendió al cuarto de la tarde que se fue inédito. Un toro con más raza y clase al que había que torearlo por abajo para hacerlo romper. El español lo lidió siempre a media altura, cuando el animal no quería ese planteamiento, tampoco al intentarlo en cercanías; pero cuando era bregado por abajo, si humillaba siguiendo con mayor celo el capote, lo que no hacía con la muleta a media altura. Pinchó varias veces y escuchó un aviso.     

El primero -segundo de lidia- del Alfonso de Lima, con el hierro de Salamanca, fue el peor de la tarde, soso, sin clase, codicia, ni trasmisión. El peruano lo intentó, pero había poca tela para cortar, logrando ligar una serie con la muleta puesta en la cara. Al quinto de Salamanca, había que convencerle de embestir, someterle por abajo para desengañarlo y poder correrle la mano. No fue por esa vía y entre dudas, remates por alto y enganchones, se embarulló, haciendo más complicado el resto de la lidia. Mató de varios intentos.

Plaza de Acho. Con tres cuartos de entrada se lidiaron seis toros de San Pedro (1°, 3° y 6°) y Salamanca (2°, 4° y 5°), bien presentados, nobles, de juego variado destacando el 1°,3°, 4° y 5°. Confirmó alternativa Morenito de Aranda (saludos desde el tercio y silencio), Alfonso de Lima (silencio y silencio) y Jesús Enrique Colombo (oreja y oreja)

viernes, 17 de octubre de 2025

Revista CARETAS: "ACHO MAS VITAL Y TORERA QUE NUNCA" Escribe JAIME DE RIVERO

 


A pocas horas de iniciar la feria, repasamos los carteles de Acho 2025, que tiene como atractivo central la actuación en solitario del mandón del toreo, Andrés Roca Rey, que celebra diez años de alternativa.

Escribe Jaime de Rivero


Ya estamos en semana grande, a pocas horas de que se inicie la septuagésima octava edición de la Feria del Señor de los Milagros, que fuera creada en 1946 por Fernando Graña Elizalde, materializando la propuesta del crítico taurino Manuel Solarí Swayne “Zeñó Manue” para tener una feria que reúna dos tradiciones muy arraigadas en Lima, y que la dotan de identidad y personalidad: la procesión del Señor de los Milagros y las corridas de toros.

La empresa ha tomado el riesgo de concentrar el ciclo en 15 días; tendremos toros los sábados y domingos durante tres fines de semana consecutivos. Apuesta importante que hace unos veinte años fracasó con la empresa de Roberto Puga, pero que con los cambios del mundo de hoy, parece ser una fórmula exitosa para atraer más público a la plaza.  La taquilla se ha disparado a niveles históricos, superando los 9,000 abonados, algo que no ocurría en Acho desde la década de los 60 o 70, en que hasta las escaleras tenían abonados, informales naturalmente, pero que graficaban la vitalidad que gozaba entonces nuestra afición.  Hoy estamos recuperando esa posición, mientras que en América y España ocurre lo contrario. 

Los carteles de Acho 2025, como siempre, combinan lo mejor y más interesante de la temporada española.

El ganado bravo, pieza angular sobre la que se construye la maravilla excepcional del toreo, contempla dos ganaderías de renombre, que habitualmente lidian en plazas de primera categoría de España.  Son las que pidan las figuras, y no porque sean las más fáciles, dóciles ni manejables, sino porque son las que dan más garantías de triunfo, dada su “regularidad”. Esto es, echar mayor número de toros que embistan por corrida, lo que hace más probable que las figuras puedan triunfar, que es lo que necesitan para mantenerse en lo más alto.  Algo que de por sí en los toros, dada la presión única de esta profesión en la que la vida humana está en juego, es muy duro de sobrellevar, porque no basta ser, hay que estar y demostrarlo cada tarde en la plaza.

Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández no necesitan presentación. Ambas provienen del llamado encaste Domecq (esencialmente de la línea de Juan Pedro Domecq Núñez de Villavicencio, forjada hace más de un siglo), pero con matices de bravura distintos, provenientes de las divisiones y cruces posteriores.

A estos hierros españoles, los acompañan los nacionales de mayor vigencia como como Paiján, San Pedro, Salamanca, Camponuevo y San José del Monte.

La figura estelar de la feria es Andrés Roca Rey que cumple diez años en la cúspide del toreo. Desde aquel 19 de septiembre de 2015, en que tomó la alternativa de manos de Enrique Ponce en la plaza francesa de Nimes, se instaló en el primer lugar de la torería, consolidándose como la gran figura que es.  Pero a Roca Rey nadie le ha regalado nada, por el contrario, lo ha dado todo cada tarde. No recuerdo que haya existido un torero que haya arriesgado tanto y tantas veces como lo ha hecho Andrés durante mas de una década, considerando su etapa de novillero. Ha revolucionado la fiesta, no solo en el ruedo sino en los tendidos atrayendo a mucha gente joven que antes no acudía a los cosos, pero sobre todo a los niños, que al final de sus tardes de triunfo, bajan al ruedo para arroparlo en su salida grande. Algo que no se veía en mucho tiempo.

Roca ha tenido una buena temporada, toreando menos y cobrando más, siempre en la cúspide. El apoderamiento de su hermano Fernando Roca Rey, le ha asentado bien y le ha permitido un respiró voluntario en esta profesión en la que cuesta tanto estar vigente, más aún en la cima y con cierta oposición de la prensa española, que no termina de aceptar que un peruano reine en su fiesta nacional. Actuará en solitario con toros de Núñez del Cuvillo, Domingo Hernández y Paiján en el gran cierre de feria, el domingo 2 de noviembre.

La tarde previa, del 1° de noviembre, ofrece otro cartel digno de Madrid y Sevilla. Con reses de Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández, alternarán Sebastián Castella, cuatro veces ganador del escapulario de oro, Alejandro Talavante, triunfador de San Isidro 2025, y David de Miranda, que entra en la terna sustituyendo a José Antonio Morante de la Puebla, que hace cinco días de forma inesperada -y creo yo definitiva- decidió retirarse y cortarse la coleta en la primera plaza del mundo, en una tarde en la que, con el público entregado, salió por la puerta grande.  David de Miranda es el torero revelación de esta temporada desde la puerte del Principe que abrió en Sevilla. Ha tenido tardes importantes en San Isidro, Málaga, y es de los que también se arriman como pocos. Un acierto el reemplazo.

Otro cartel importante es el del domingo 26 de octubre, con toros de Paiján y Domingo Hernández. Un conocido nuestro, David Galván, que ha tenido otra buena temporada en España, alternará con Fernando Adrián, que estuvo notable con un bravo de Victoriano del Rio en el último San Isidro, triunfador de Pamplona, entre otros, y Joaquín Galdós, que busca en Acho otra gran tarde para conquistar su segundo escapulario de oro.

En la primera corrida de feria, este domingo 19 de octubre, actuarán diestros muy aclamados en el interior del país. Con toros de San Pedro y Salamanca, harán el paseíllo Morenito de Aranda, Alfonso de Lima y Jesús Enrique Colombo.  Toreros de entrega que aseguran el espectáculo.

El ciclo se completa con dos novilladas interesantes.  El sábado 18 de octubre inauguran la feria, Felipe Negret, Joaquín Caro y Josué Mallqui, con ganado de San José del Monte. El sábado 25, con astados de Camponuevo, se presentan novilleros que hacen campaña en España. Pedro Luis, nuestro compatriota que está dando pasos importantes para ser protagonista de las siguientes temporadas, maneja con buen gusto las telas y le funciona muy bien la cabeza delante del toro, que es lo más difícil.  Alternará con José Antonio Guerra y el portugués Tomas Bastos, sobre los que la crítica también tiene mucha expectativa.


lunes, 13 de octubre de 2025

REVISTA APLAUSOS: LIMA SE PREPARA PARA UNA GRAN FERIA QUE CULMINARÁ CON LA GESTA DE ROCA REY

 

El 18 de octubre se inicia la Feria del Señor de los Milagros en la que Andrés Roca Rey se encerrará en solitario, conmemorando 10 años de alternativa

Corresponsal: Jaime de Rivero


Lima será el epicentro taurino de las próximas semanas. El 18 de octubre se inicia la septuagésima octava edición de la Feria del Señor de los Milagros, la más antigua de América y la única que actualmente se celebra en una capital del continente.

Serán seis festejos en dos semanas, dos novilladas y cuatro corridas de toros, que culminarán el domingo 2 de noviembre con la encerrona en solitario de Andrés Roca Rey, el torero peruano más importante en cinco siglos de tradición taurina, que se inició en 1540 cuando el conquistador Francisco Pizarro lanceó a caballo un toro en la Plaza de Armas de Lima.

Desde que en mayo se lanzó esta gesta en Madrid, se generó una expectativa enorme por ver a Roca Rey en Acho y de distintas latitudes taurinas comenzaron a confirmarse las reservas de entradas y hoteles.

La taquilla es el mejor reflejo de este nuevo boom taurino en tierras peruanas. La venta de entradas se ha disparado y se han duplicado el número de abonados de la plaza de Acho en relación al año 2024, superando ya los 8,000, y estando muy cerca de triplicar los abonos registrados en la feria de 2023. Un hito que refleja la solidez de la tauromaquia peruana, que vive un auge sin precedentes desde hace un par de décadas.

Serán dos semanas de intensa actividad taurina con coloquios, celebraciones y actividades culturales, que incluyen la ópera Carmen, que por primera vez se presentará en el albero de la plaza de Acho.

Los festejos son los siguientes:

Sábado, 18 de octubre. Novillos de San José del Monte para Felipe Negret, Joaquín Caro y Josuel Mallqui.

Domingo 19. Toros de Salamanca y San Pedro para Morenito de Aranda, Alfonso de Lima y Jesús Enrique Colombo.

Sábado 25. Novillos de Camponuevo para José Antonio Guerra, Pedro Luis y Tomás Bastos.

Domingo 26. Toros de Paiján y Domingo Hernándes para David Galván, Fernando Adrián y Joaquín Galdós.

Sábado, 1 de noviembre. Toros de Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández para Morante de la Puebla, Sebastián Castella y Alejandro Talavante.

Domingo 2. Toros de Núñez del Cuvillo, Domingo Hernández y Paiján para Roca Rey, como único espada.