PONCE Y TALAVANTE REMECEN LIMA
Escribe Jaime de Rivero
Crónica para Agencia EFE, publicada por ABC, El Mundo, Terra y otros de España.
Una gran corrida de Juan Pedro Domecq permitió una gran tarde de toros en la cuarta corrida de la Feria del Señor de los Milagros en la plaza de Acho. Enrique Ponce, Alejandro Talavante y Joselito Adame, cortaron una oreja cada uno al bien presentado encierro de Juan Pedro Domecq, que embistió con clase, nobleza y bravura, destacando los corridos en 3,°4°, 5° y 6° lugar.
Enrique Ponce es Torero de Lima y lo demostró una vez más en Acho. Le cortó una meritoria oreja al que abrió plaza y que tenía la virtud de la movilidad. La faena la estructuró por ambos pitones, aprovechando el recorrido del astado, sin obligarle ni presionarle. Faena sobria por encima de las condiciones del toro, que le permitió pasear la primera oreja de la tarde.
El cuarto, colorado y bravo, embestía con prontitud y codicia los engaños. Los primero tercios fueron de estudio y tanteo. Con la muleta, el valenciano brindó una faena colosal llena de emoción y dominio, superando las dificultades del toro que en los primeros lances acudía con la cara alta. Ponce manejó los tiempos y la fuerza del toro con total precisión, calibrando una faena maciza por el dominio, el empaque y la rotundidad. Toreó por derechazos y siguió por naturales, de uno a uno, dejando la muleta muerta en la cara para llevarlo toreado hasta detrás de la cadera, ante la algarabía del público que le gritaba ¡Torero! ¡Torero!. Las poncinas y el abaniqueo final fueron el colofón de la gran faena que el estoque y el descabello impidieron coronar con trofeos, dando una vuelta al ruedo apoteósica con la plaza entregada a sus pies.
Alejandro Talavante reafirmó en Lima porque es uno de los grandes triunfadores de la temporada española. Estuvo aseado con el segundo de la tarde, con el que no llegó acoplarse del todo. La gran faena llegó con el quinto, un toro serio, hondo y cuajado, que fue el más bravo del encierro, y al que Talavante comprendió de principio a fin. Inició la faena de rodillas exponiendo muchísimo y poniendo la plaza de cabeza. La faena se soportó en el toreo fundamental por ambos pitones, como en los adornos, especialmente los cambiados y las arrucinas que ya son sello propio del torero. Un arrimón final puso la plaza a hervir. Mató en el segundo intento y cortó una oreja de ley.
Con valor, esfuerzo y entrega, Joselito Adame cortó una meritoria oreja al tercero de la tarde, logrando muletazos de buena factura a buen toro, que fueron coreados por un público a favor. Una estocada caída no fue óbice para que le concedan el trofeo. Con el sexto, el diestro mexicano estuvo voluntarioso, lidiando en cercanías pero sin poder redondear faena con un gran toro de Domecq.
Buena crónica resumida y clara
ResponderEliminarJoselito Adame tuvo el mejor lote del encierro y el sexto fue un gran toro que no se aprovecho.
ResponderEliminarNo comparto su parecer, el primero de Adame fue de lejos el peor de la corrida, la oreja fue ganada a pulso, no cualquiera le corta una oreja a ese toro, el sexto desclasado en su embestida, tenía una leve cojera en la mano derecha. Por otro lado no se puede opinar de algo que no se vio, el autor de la crónica salió del tendido en plena faena al sexto por ello su opinión adolece de seriedad
EliminarLos lotes fueron parejos todos en bravo, todos de orejas. No comparto lo que el tercero fue el peor, eso si, el sexto fue un gran toro. Incluso le pregunte a Talavante cual le gusto mas y me dijo que el sexto.
ResponderEliminarVeo que me sigues hasta con la vista en la plaza, un honor para mi, pero fijate bien, no sali del tendido... me quedè en la boca del vomitorio viendo como se desperdiciaba ese sexto toro.
Porque le gustó a Talavante, no necesariamente se puede decir que el sexto fue el mejor
ResponderEliminarNadie dice que el sexto sea el mejor, fue un gran toro.... mejores o peores ya es lo de menos porque la corrida fue pareja.
ResponderEliminar