Por Jaime de Rivero Bramosio
En octubre de 1946, el empresario y ganadero Fernando Graña Elizalde creó
la Feria del Señor de los Milagros, recogiendo la propuesta visionaria de
Manuel Solari Swayne “Zeño Manue” de unir las tradicionales corridas de toros
con las celebraciones del santo patrón de la ciudad. Desde entonces, los mejores toreros del mundo
han venido a Lima para disputar el Escapulario de Oro y triunfar en la
legendaria plaza de Acho.
Este año se celebra la 64° edición de la feria y la empresa TauroLima ha
hecho una apuesta muy fuerte al reunir a las máximas figuras del toreo. Después
de tiempo, Acho logra lo que ninguna otra plaza del mundo ha podido,
reafirmando así la categoría y esplendor que los toros siempre tuvieron en la
tres veces coronada ciudad. La expectativa desatada es enorme y se espera una
afluencia masiva de espectadores y aficionados, tanto locales como extranjeros.
La feria es corta. El abono se compone de cuatro corridas de toros y una
novillada sin picadores que como aperitivo, marcará el inicio de los festejos. Miguel
Ángel Perera es el único diestro que actuará en dos tardes. Los demás compiten en
igualdad de condiciones y oportunidades, con una fecha y dos toros para pelear
por el codiciado galardón. La selección de los lotes y la providencia en el sorteo
serán ahora más decisivos que nunca.
Para esta edición se han adquirido dos encierros de Roberto Puga. 9
astados pertenecen al hierro que lleva su nombre y con el que ha recibido 3
Escapularios de Plata en los últimos 6 años, y los 3 toros restantes son de
Montegrande, que tiene la misma reata pero que lidia a nombre de sus hijas Puga
Buse y que también ha conquistado un Escapulario de Plata. Uno de estos encierros es el que había sido cuidadosamente
seleccionado para el debut de los puga
en la feria de Calí, que al final no llegó a concretarse. La empresa también ha
comprado dos encierros de La Ahumada, divisa colombiana que el año pasado se
llevó el Escapulario de Plata por el toro “Galante” lidiado por David Galán,
hijo del recordado Antonio José Galán.
De este modo, repiten las ganaderías que triunfaron en la feria del año
anterior, lo que asegura que un alto promedio de toros embista con clase y
nobleza.
La nómina de matadores de toros está liderada por el valenciano Enrique
Ponce, figura de época que ha marcado el ritmo de la fiesta por los últimos
veinte años. Sucesor de Manzanares y Espartaco, ha permanecido en el primer
lugar sin altibajos durante prácticamente toda su carrera profesional. Esto es
sólo posible gracias a su asombrosa facilidad para pensar en la cara del toro y
resolver con acierto en cada momento.
Con el poder del temple en su fabulosa muleta, es capaz de armar faena
sin toro. Todavía se recuerda aquella tarde en la que desorejó al ya célebre “Artista”
de Bernaldo de Quirós en la feria de 2007. Ponce ha tenido una gran temporada hasta el
momento. La inició cortando un rabo en la plaza México y cuatro orejas en dos
corridas de la feria de Fallas, en la que fue proclamado triunfador por la
Diputación de Valencia. Su toreo está en pleno auge; recientemente indultó dos
toros y cortó 10 orejas en sólo una semana.
JOSE TOMÁS
El atractivo principal del cartel limeño y el gancho taquillero es José
Tomás. El torero de Galapagar es la sensación actual del toreo, tras retornar hace
un par de años de un exilio voluntario que lo tuvo alejado de los ruedos por más
4 años. Su nombre agota los billetes y
pone la reventa en los cielos, tal como solía ocurrir con Manuel Rodríguez
“Manolete” o Manuel Benítez “El Cordobés”.
Tomás arrolla donde se presenta con su toreo de exposición, incólume,
recio y majestuoso. Se juega la vida sin inmutarse, oscilando siempre entre la
tragedia y la gloria.
La actuación más gravitante de Tomás en Lima se produjo durante la feria
de 1998 y tuvo también como protagonista a “Margarito” de El Torreón. Aquella
vez estuvo a punto de ganar el Escapulario de Oro. Su última actuación en el
coso del Rímac fue en aquél mano a mano con Paco Ojeda en el 2001.
A inicios de temporada José Tomás también destacó en las corridas
falleras, al lograr la mejor faena con “Utrerito” de Núñez del Cuvillo,
premiado como el más bravo del ciclo. En lo que va de la temporada, ha tenido
actuaciones destacadas en Castellón, Málaga, Jerez de la Frontera y otras plazas.
EL JULI
El madrileño Julián López “El Juli” ha comenzado esta temporada con un
golpe de autoridad tanto en Olivenza como en Valencia, abriendo en ambas la
puerta grande.
Ratificó en Sevilla su categoría al cortar un apéndice a un toro
de Daniel Ruiz, y estuvo a punto de abrir la famosa Puerta del Príncipe en la
corrida de El Ventorrillo, en la que el acero le impidió sumar los tres
apéndices que se exigen para ello.
En Nimes conquistó una vez más a la afición
francesa, coronándose triunfador. Pero
la faena rotunda y el triunfo de clamor llegaron en Alicante con un pupilo de
Núñez del Cuvillo y por la que recibió elogios de la crítica. Semanas después sumó su 15° puerta grande en
la Monumental de Barcelona.
El Juli
está en un gran momento y se postula para ganar el Escapulario de
Oro, trofeo que ya obtuvo en 1998 y 2005.
SEBASTIAN CASTELLA
El francés Sebastián Castella ha venido a Lima en muchas oportunidades y
ha ganado el Escapulario de Oro en el 2003 y 2006. Torero que gusta mucho por que combina elementos
tremendistas que llegan al público con el toreo de calidad y ensueño que hace
vibrar a los más entendidos.
Este año
Castella ha triunfado en la feria de San Isidro, siendo el único capaz de abrir
la puerta grande de la plaza de Las Ventas.
Aunque el premio isidril lo
recibió José Antonio Morante de la Puebla, muchas voces cuestionaron la
decisión y reivindicaron a Castella.
Su campaña en España y Francia continúa la
senda exitosa de los años precedentes, por lo que promete ser uno de los ases de la próxima feria
limeña.
JOSE MARIA MANZANARES
El triunfador de la feria de Abril de Sevilla ha sido José María Dolls
Samper “José María Manzanares”, hijo del Torero de Lima que lleva su
nombre. Manzanares Jr. también ha
logrado este año faenas importantes en Barcelona y Alicante, ambas con reses de
Juan Pedro Domecq. Manzanares regresa a
Lima con la calidad, clase y buen gusto con que deslumbró en la feria
pasada. Con la espada está muy certero y
ha sido premiado este año como la mejor estocada en las ferias de Sevilla y San
Isidro. Manzanares tiene una cabeza privilegiada y ha heredado el empaque de su
célebre estirpe. Está voceado como la
próxima figura del toreo.
PERERA
Miguel Ángel Perera, diestro muy conocido en Lima, que incluso toreó
como novillero en las ferias de 2002 y 2003. Perera ha estado formidable en las
temporadas anteriores y también este año. Cortó el rabo número 120 de la plaza
México a inicios de año, continuando en España una campaña muy fuerte en la que
ha triunfado en Olivenza, Castellón y Málaga.
Estuvo presente en la corrida de la Beneficencia de Madrid, la más
importante del calendario taurino, teniendo las intervenciones más destacadas
de la tarde pero que se frustraron por pinchar en ambos toros, perdiendo
probables orejas.
FINITO DE CORDOBA
El arte y la seriedad son componentes principales del toreo de Juan
Serrano “Finito de Córdoba”, quién abrirá plaza la tarde en que se presenta
José Tomás. Con ya varios años de alternativa, Finito tiene una reputación bien
ganada y encaja en cualquier cartel de categoría. Sin embargo, a su toreo le
persigue la sombra de la irregularidad. Pero con Finito jamás se sabe porque su
hacer está pleno de excelencia y buen gusto. En Lima no ha repetido una faena
tan preciosa como la que dio a “Bodeguero”, el bello burraco de Roberto Puga
lidiado en la feria de 2000 y con la que casi gana el Escapulario de Oro, que
finalmente fue de Ponce. Los derechazos al
de Puga todavía son recuerdo vivo de quienes poblamos esa tarde los viejos tendidos
del Rímac.
EL CID
La lista de extranjeros la completa Manuel Jesús “El Cid” que interviene
en la feria por segunda vez. En el 2004
se fue inédito por las condiciones del ganado que le correspondió.
El Cid es un torero
valiente y versátil que torea corridas comerciales como también las más duras.
Ha sido triunfador de la feria de San Isidro en las ediciones de 2005, 2006 y
2008, lo que testifica el alto rango de su cartel. Este año ha triunfado en Santander, Barcelona
y en la localidad francesa de Mont de Marsán, por citar los lugares más
relevantes. A El Cid se le espera con mucho interés porque la afición quiere
conocer con sus propios ojos la comentada calidad de su toreo.
LOS PERUANOS
Este año se celebra por tercera vez en la historia de la feria “la
Corrida de la Peruanidad” que tendrá como protagonistas a Juan Carlos Cubas,
que no se presenta en Acho desde 2004, Fernando Roca Rey, diestro muy conocido
y que hace fuerte campaña en el interior del país y el joven matador Alfonso
Simpson, que dejó buena impresión la tarde de su alternativa en la feria morada
de 2008, que saldó con una oreja. La
terna nacional mataría una de las corridas colombianas. Esperemos que esta vez
los toros den juego, pues en las ediciones anteriores de la “Corrida de la
Peruanidad” celebradas en 1973 y 1986, el ganado impidió el triunfo de los
coletas nacionales que ni siquiera pudieron cortar una oreja.
Esta es pues la feria de postín que se nos viene. Este año Acho será el
epicentro mundial del toreo. Los toros deben reunir peso, edad y trapio para salvaguardar
la seriedad del espectáculo y la jerarquía ganada por la feria limeña. Vendrá gente de todos lados y es necesario
que quienes son parte de la fiesta como los profesionales, empresarios y
periodistas realicen a cabalidad sus labores para mantener en alto el pendón.
El aficionado –que también es parte- una vez más, acudirá con ilusión a la
plaza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario